¿Gata embarazada? Te ayudamos
Hay cosas maravillosas en el mundo y que tu gata este embarazada. Puede ser una situación de mucha intriga al no saber nada del tema. Por eso, hoy en Gatificando te contamos todo. ¿Gata embarazada? Te ayudamos. Veamos.
Saber que nuestra gata está embarazada es primordial para su salud y la de las crías. Cuando esté embarazada nos dará algunos síntomas o pistas para notar su estado.
Una gata tiene su primer celo, de manera general, entre los 8 y 10 meses de edad (depende de la gata y la raza). Esto quiere decir que, a partir de este momento, un embarazo puede ocurrir. En el momento del celo, las gatas estarán más cariñosas y nerviosas y es muy probable que tiendan a escaparse en busca de algún macho si no hay ninguno en el hogar.Es por esto, que es muy importante que entendamos que si queremos evitar que nuestra gata se quede embarazada, la esterilización es básica.
Por cierto, es esta época es importantísimo mantener a tu gata super aseada, ya que esta pasando por muchos cambios y nosotros debemos ayudarla.
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Síntomas de una gata embarazada
- Cambio de coloración en los pezones: Se vuelven más rosados para resultar más visibles para los futuros gatitos que tendrán que mamar. Éste es uno de los signos más fáciles de observar durante la preñez de las gatas.
- Hinchazón en las mamas.
- Náuseas: Pueden aparecer entre la cuarta y la quinta semana de gestación y son consecuencia de los cambios hormonales del organismo de la gata.
- Vientre abultado: Suele empezar a notarse a partir de la cuarta semana de gestación.
- Aumento de peso: Al final del embarazo, la gata podrá haber aumentado entre un 20% y un 30% de su peso habitual.
- Cambios de humor
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¿Cuánto dura el embarazo de un gato?
Si tu gata está embarazada, debes saber que su gestación durará alrededor de 9 a 10 semanas, unos dos meses y medio. Concretamente, entre 62 y 67 días, con un promedio de 65 días. (En cada embarazo las gatas pueden parir entre 1 y 6 gatitos y pueden llegar a tener más de un parto al año.)Esta duración se cuenta a partir del día que tuviera lugar la cópula con el gato macho.
Cuidamos para una gata embarazada
- La dieta que debe llevar una gata embarazada tiene una diferencia sustancial con respecto a una gata normal: Puede (y debe) ser ligeramente más rica en calorías, precisamente porque su gasto aumenta como consecuencia de la gestación. Además, es interesante que adquiera una pequeña reserva de grasa para la producción de leche tras el parto, pues durante el periodo de lactancia les resulta más costoso transformar alimento en leche para gatitos.
- Las camas para gatos son también un aspecto a tener muy en cuenta. Lo ideal es proporcionar a tu gata un espacio de descanso y plena comodidad, pues a buen seguro se convertirá en su nido. Te recomendamos una cama dona, donde se sentirá extremadamente cómoda.
- Lo que más agradece una gata embarazada es una dosis extra de cariño. Es un animal con sensibilidad y le encantará que estés más cerca de ella en estos momentos, con caricias y palabras aún más agradables de lo habitual. Debes mimarla mucho además de cuidarla. Un guante masajeador sera tu solución.
- También valorará que juegues con ella. Una caña retráctil sera perfecta para esos momentos en donde tú y ella podrán disfrutar muchísimo.
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